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GRUPO DE REFLEXIÓN SOBRE EL MUNDO HISPÁNICO

Max GLÜCKSMANN

(Czernowitz, 1875-Buenos Aires, 1946)

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Jean-Claude SEGUIN VERGARA 

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Glüksmann. Descendance:

  • Mordechai David dit "Max" Glücksmann (Czernowitz, 08/03/1875-Buenos Aires, 20/10/1946) épouse (Buenos Aires, (15/04/1907) Rebeca Lerman.
  • "Enrique" Glücksmann.
  • "Jacobo" Glücksmann (1881-)
    • Gerardo Glücksmann
    • Andrés Max Glücksmann

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Oriundo del Imperio austro-húngaro, Max Glücksmann, por haber arrojado un tintero a su maestro que trataba a los judíos de "perros", decide con un amigo salir para América y llegan a Buenos Aires, el 27 de julio de 1890. Apenas llegados, le disparan y asesinan a su amigo en un momento histórico inestable. Sin hablar el español, Max Glücksmann se busca la vida y se emplea en una serie de trabajos de baja categoría. Ya en 1891, empieza a trabajar en la casa Lepage como ayudante de fotografía:

Hace ya muchos años que un comerciante francés, don Enrique Lepage, fundó modestamente, en un pequeño local de la calle Bolívar, una casa de artículos de fotografía, que pronto adquirió justo renombre para los aficionados y profesionales del arte de Daguerre. Entre los escasos empleados que ayudaban a Lepage a vender placas, máquinas y papeles, se destacaba por su afabilidad, por su extraordinaria viveza y por sus condiciones generales, un muchachito — un niño casi — que llamaba, como vendedor, la atención de cuantos clientes llegaban a la casa.


ALDECOA, 1914: 9.

En una entrevista publicada en 1931, así recuerdo Max Glücksmann sus primeros años cuando trabaja en la casa Lepage:

—¿Hace mucho que trabaja en esto, señor Glücksmann?
—Cuarenta años. Yo entré como empleado en la antigua Casa Lepage y Cía., ubicada entonces en la calle Bolívar 375, que se dedicaba al ramo de fotografía. Mi sueldo de aquella época era modestísimo, pero de acuerdo a mi categoría de «pinche».
—¿Se puede saber cuánto?
—Cincuenta pesos mensuales. Todo estaba en relación a mi sueldo. El local que ocupaba Lepage y Cía., por ejemplo, medía 7 metros por 25. Trabajé mucho; poco a poco fui adquiriendo práctica, mayores conocimientos... hasta hoy.


Revista Atlántida, jueves 16 de julio de 1931.

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"La 'Casa Lepage' primitiva, en la calle Bolívar número 375."
ALDECOA, 1914: 9.

Según testimonios familiares, Max Glücksmann interesado por el nuevo invento de los hermanos Lumière viaja a Francia y termina por comprar un cronofotógrafo de la casa Gaumont. Son los años de las primeras películas:

—¿Y de cine, señor Glücksmann, qué nos puede decir?
—Eso es muy largo. En 1900 realmente comenzó la cinematografía con pequeños aparatos para aficionados. Su perfección se inició cuando pudo explotarse comercialmente. Desde 1900 a 1910 comenzó a popularizarse el cine en forma intensiva. Mucho de ello se debe a los hermanos Pathé, quienes fueron los primeros en realizar films en escenarios, con reconstrucciones que tenían un gran valor por el público. Entre aquellos films recuerdo La guerra ruso-japonesa, La coronación de Eduardo VII y Guerra anglo-boer. Entusiasmaron al público. Después, también se llegó a lo mejor, como en la fonografía.


Revista Atlántida, jueves 16 de julio de 1931.

Des 1904, por lo menos, el papel de Max Glucksmann en la empresa de la Casa Lepage es de primer orden como se puede entender en el artículo siguiente:

[...] Una hermosa fiesta en honor del señor ministro de Austria-Hungría, a la que concurrieron miembros distinguidos de esta colectividad y de la sociedad argentina. El Sr. Glücksmann, por medio de su director artístico Mr. Py, hizo proyectar por la "linterna luminosa" interesantes vistas de la república y el exterior, llamando entre éstas extraordinariamente la atención una que representa un combate naval en Port Arthur y muchas escenas militares desarrolladas por el ejército ruso en Manchuria. Despertaon también mucho la atención unas fotografías que exhibió en la proyección luminosa fija. [...] Los intermedios de la sesión fotográfica, dada en su sucursal de la Avenida de Mayo, fueron amenizados por la audición de algunos discos de Caruso, Tamagno, Bonci y Fabbi, reproducidos de una manera admirable por el gramófono de la sociedad internacional. El Sr. Glücksmann, que está dotado de sentimientos generosos, ha prometido reproducir esta fiesta en un teatro, a beneficio de una sociedad de caridad.


El Diario, Buenos Aires, 13 de septiembre de 1904.

En abril de 1907, se casa con Rebeca Lerman:

El lunes se celebraron las bodas de la interesante señorita Rebeca Lerman con el señor Ma x Glücksmann. Este último fué despedido de la vida de soltero por sus amigos, con un banquete que tuvo lugar el sábado.


Caras y Caretas, nº 446, Buenos Aires, sábado 20 de abril de 1907, p. [46].

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Caras y Caretas, nº 446, Buenos Aires, sábado 20 de abril de 1907, p. [46].

A partir de 1908, figura ya como sucesor de la Casa Lepage:

Este niño fué creciendo con el pequeño negocio, hasta llegar a convertirse en una parte integrante del mismo, en el otro yo de don Enrique Lepage, y tanto fué así que este último, rey ya de la fotografía en Buenos Aires, decidió nombrar al joven Max su príncipe heredero
Llegó un día en que Lepage, célebre en Buenos Aires y rico, hizo efectiva la herencia, y entonces Glücksmann, con su espíritu emprendedor, y entonces Glücksmann, con su espíritu emprendedor, con su clara visión para los grandes negocios y hábil discípulo de un bien hábil maestro, dio a la casa Lepage nuevos vuelos, fijó orientaciones que ha tenido el acierto de ir cambiando sin derrumbar lo viejo. Esto es: ha edificado, ha progresado, ha convertido su casa en poderosa organización, sin olvidarse fiolo antiguo, sin descuidar por un momento siquiera lo que constituyó base y principio dela casa Lepage.


ALDECOA, 1914: 9-10.

También recuerda esos años Max Glücksmann:

—¿Cuándo se independizó, señor Glücksmann?
—En 1908 pude comprar la Casa Lepage, que ya tenía sucursal en la Avenida de Mayo. También había sufrido ampliaciones y se dedicaba al cine desde 1900.
—¿También había aumentado el personal?
—Cuando yo entré éramos tan sólo tres empleados.
—¿Y cuándo compró la casa?
—Ya había ciento cincuenta.


Revista Atlántida, jueves 16 de julio de 1931.

Sus actividades lo conducen a ocupar uno de los primeros lugares de la industria cinematográfica. A lo largo de los años 10, construye un auténtico emporio y es dueño de un gran número de salas de cine tanto en Argentina como en Chile, Uruguay y Paraguay.

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Vista de la Casa Central. Callao y Bme Mitre
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Sección Cintas Galería Cinematográfica
La Nación. Número especial en el Centenario de la Proclamación de la Independencia, 1816-9 de julio-1916, Buenos Aires, p. 105.

También desarrolla sus actividades fonográficas. La empresa Odeón acepta construir una fábrica para la comprensión de discos y en 1917, crea el sello discográfico Nacional Odeón.

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Caras y Caretas, nº 517, 29 de agosto de 1908, p. [13].

Dispone ya de un salón, el Palace, cuando inaugura, en 1913, una sala de cine, el Electric Palace, situado en la calle Lavalle:

Hace ya algún tiempo que deseábamos hablar del Electric Palace, el cinematógrafo últimamente construido en la calle Lavalle; mas por unas u otras causas se ha ido quedando en el tintero sin que hiciésemos merecida justicia a su importancia. Hoy que ya falta poco para que se inaugure, no podemos pasarlo por alto más tiempo y justo es que le dediquemos siquiera la atención de una página.
No hace mucho notamos que en silencio, sin bombo ni platillos, sin anuncios previos, había aparecido en la calle Lavalle, entre Suipacha y Esmeralda, la hermosa construcción que en esta página se reproduce e inmediatamente preguntamos si era teatro o cine y a quien pertenecía. La respuesta no se hizo esperar: era cine y pertenecía al inevitable Max: a Max Glücksmann, el hombre de las grandes innovaciones y de las grandes novedades. En cuanto lo supimos acudimos bien pronto a inquirir detalles personalmente, y Enrique, el amable hermano de Max — éste se halla actualmente en Europa preparándonos sorpresas—nos los dio muy amplios, contestando afablemente a las preguntas que el cronista le hizo.
Nos extrañaba que Glücksmann, teniendo tan cerca su lujoso Palace, abriese en aquel lugar un nuevo cine, de gran lujo como será el Electric, pero ahora que estamos en el secreto, podemos adelantar que se trata de algo muy diferente. El Palace seguirá siendo nuestro teatro de gran lujo, el centro de las reuniones sociales por excelencia y de la suprema elegancia.
El «Electric», lujosísimo en todos los detalles, será, sin embargo, eminentemente popular, tanto por sus precios como por el carácter especial de las representaciones, que obedecerán a un sistema de feliz concepción, cuyos detalles no podemos revelar aún, pero que llamará mucho la atención, obteniendo para Glücksmann un nuevo y ruidoso éxito, — se lo auguramos.


Caras y Caretas, nº 785, 18 de octubre de 1913, p. [16].

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Caras y Caretas, nº 785, 18 de octubre de 1913, p. [16].

Ese mismo año, Max Glücksmann empieza a proyectar, semanalmente, el noticiero "Actualidades Argentinas" y es une de los mayores distribuidores de películas en Latinoamérica.

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La cinematografia italiana ed Estera, nº 1, Turín, 15 de enero de 1916, p. 126.

Junto a sus actividades relacionadas con el cine, llega a dominar el mercado discográfico argentino, y en particular el del tango. Durante años, Max Glücksmann sigue con el negocio del cinematógrafo e inaugura, en 1917, el Cine-teatro Capitol.

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"El señor Max Glücksmann dirigiendo la palabra a los invitados al lunch con que se celebró la inauguración del Cine-teatro Capitol, propiedad del nombrado."
Caras y Caretas, nº 1503, 23 de julio de 1927, Buenos Aires, p. [76].

En la misma entrevista, evoca su emporio comercial:

—¿Cuántos empleados tiene?
—Mil quinientos, incluyendo a los de venta, grabación, fábrica, imprenta, cinematografía, etcétera. Una pequeña república.
—¿Y sucursales?
—En Rosario, Córdoba, Santa Fe, Montevideo y Santiago de Chile. Casas de compra en París, Londres y Nueva York.
—¿Cuántos cinematógrafos posee, señor Glücksmann?
—Setenta.


Revista Atlántida, jueves 16 de julio de 1931.

El crack de Wall Street lo lleva a deshacerse de sus salas de cine, quedándose sólo con el sello "Glucksmann".

Fallece a los 71 años y es enterrado en el Cementerio israelita de Ciudadela (Buenos Aires).

Fuentes

ALDECOA León de, "El hogar del film en Buenos Aires", Caras y Caretas, nº 796, 3 de enero de 1914, p. [9-11].

DUCROS-HICKEN Pablo C., "Orígenes del cine argentino", El Hogar, 1954-1955.

LEWIS Mollie, Hombres, cocineros y reyes del cine: Cultura popular y personalidades judías en Buenos Aires, 1903-1930, Emory University, Tesis Doctoral, 2008.

"Max Glücksmann", La Nación. Número especial en el Centenario de la Proclamación de la Independencia, 1816-9 de julio-1916, Buenos Aires, p. 105.

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