El Cinematografo Lumière de Charles Étienne (Teatro Olimpo, 26 de noviembre de 1896)

El operador de los hermanos Lumière, Charles Étienne que se ocupa del puesto de Montevideo, decide, por cuenta propia, organizar una gira por Argentina. Procedente de Buenos Aires, a finales de noviembre, está en el Teatro Olimpo:

TEATRO OLIMPO-Con una regular concurrencia se verificó anoche en el "Olimpo", la función de moda anunciada.
La primera exhibición dle cinematógrafo de A. y L. Lumière, espectáculo nuevo en esta ciudad, agradó mucho al público, especialmente los cuadros: Una calle de Berlín, Una carga de caballería, Una disputa política, Artillería en Barcelona y Baño de negros en Dakar.
La lindísima comedia en dos actos y en verso, original del festivo autor don Miguel de Echegaray, "Los Hugonotes", fue muy bien interpretada por los artistas que en ella tomaron parte, que recibieron nutridos aplausos.
Terminó el espectáculo con el juguete cómico de Estremera, "Jugar al moncardón".
En vista de que el público se muestra reacio a los espectáculos teatrales, negando su asistencia a los buenos espectáculos, como los que ofrecía la compañía Galé y el Cinematógrafo, se ha dado por terminada la temporada con la función de anoche.
Galé y su compañía parten esta tarde con destino a Santa Fe, donde tiene el éxito asegurado, por hbarse hecho de antemano un nutrido abono de localidades.
El cinematógrafo regresa a Buenos Aires.

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El Orden, Rosario, viernes 27 de noviembre de 1896, p. 1.

El tono del artículo indica que la función no ha sido del agrado de los organizadores que no vuelven a organizar otra función. Curiosamente, ese mismo día se publica una "menudencia" humorística:

MENUCENDIAS-Don Deolindo se dedica a los estudios etimológicos-Encuentra la palabra "cinematógrafo", y la define de esta manera:
-Cine-viene del latín y quiere decir pequeño,-mato,-es la primera persona del presente del indicativo del verbo matar, -grafo- que viene del griego, significa escribir, todo lo cual quiere decir:
"Mato por la prensa poco a poco".

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El Orden, Rosario, viernes 27 de noviembre de 1896, p. 2.

El Cinematógrafo Argentino de Fred Figner (Teatro Frank Brown, 15-<18  de diciembre de 1896)

Fred Figner, a mediados de diciembre, presenta en el teatro Frank Brown, su Cinematógrafo Argentino:

Circo Frank Brown-La compañía que actúa en este circo continúa recibiendo la protección del público rosarino.
En la noche del domingo se encontraban ocupadas casi todas las localidades de ese amplio sitio de diversión.
Los artistas en general fueron aplaudidos y muchas veces se les hizo repetir los trabajos que eran objeto de los aplausos.
Anoche tuvo lugar otra función en la que se representó por última vez, la pantomima "Una noche en Pekin".
Para hoy está anunciado el estreno de la "Serpentina Ecuestre" y la exhibición del "Cinematógrafo Argentino", dirigido por el profesor Mr. Figner.
Por lo visto la empresa no omite sacrificios para presentar novedades y atractivos al público del Rosario.

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El Orden, Rosario, martes 15 de diciembre de 1896, p. 2.

Se conoce que la proyección no fue del todo satisfactoria -así como lo evoca el propio Fred Figner, en sus memorias, porque el día 18 de diciembre ya no figura en el programa del circo Frank Brown.

El Biofonógrafo de Joly-Normandin (Nuevo Politeama, [10]->11 de septiembre de 1901)

El inventor francés Henri Joly y su colaborador Ernest Normandin han realizado un cinematógrafo sonoro, el biofonógrafo, patentado en enero de 1900. El nuevo aparato se presenta en el Nuevo Politeama, el 10 de septiembre de 1901 :

Nuevo Politeama
El debut de Rosita de la Plata y el célebre saltador Mr. John Higgins llevaron anoche numerosa concurrencia al Nuevo Politeama, cuyos espectáculos gustan más cada día.
El biofonógrafo merece por sí solo escucharlo.
Para esta noche variada función con grandes novedades.

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El Municipio, Rosario, 11 de septiembre de 1901, p. 2.

No sabemos hasta cuando sigue funcionando el aparato - tal vez hacia en 22 de septiembre - y no tenemos informaciones sobre las vistas. Ni siguiera sabemos si el aparato se utiliza, como está previsto, con sonido.

El Cinematógrafo Nacional (Libertad 739-741, 4->4 de diciembre de 1901)

A final del año se inaugura, según Sydney Paralieu, el Cinematógrafo Nacional, en Libertad 739-741:

Fue inaugurado el 4 de diciembre de 1901, a las 20.30 horas, con la proyección de "Gran Premio Nacional en el Hipódromo Argentino". Presentaba vistas en colores de carácter local y nacional y estrenos como "El gabinete de Mefistófeles". Ofrecía exhibiciones nocturnas, a las 20.30; 31-30 y 22.30 horas. La entrada costaba $ 0,50 y los niños abonaban $ 0, 30. Brindaba novedades todos los días. Sus funciones se extendieron hasta 1902.

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Sydney Paralieu, Los cines de Rosario: ayer y hoy, Editorial Fundación Ross, 2000, p. 16.

Los años de los cafés cinematográficos (1905-1906)

Según el historiador Sydney Paralieu, el primer aparato que se presenta en Rosario, en 1905, es el Cinéografo Lubin, uno de los aparatos más conocidos del norteamericano Siegmund Lubin de Filadelfia:

CINEÓGRAFO LUBIN (Santa Fe esquina Libertad)
Funcionó por un corto período en el salón del Café de la Paix, ubicado en calle Santa Fe esquina Libertad hoy Sarmiento), entre los meses de enero y febrero de 1905.
Sus funciones comenzaban a las 20.45 y el precio de la entrada por secciones era de $ 0,30. De sus proyecciones más notorias se pueden rescatar las vistas de la guerra Ruso-Japonesa.

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Sydney Paralieu, Los cines de Rosario: ayer y hoy, Editorial Fundación Ross, 2000, p. 17.

El once de febrero encontramos una curiosa compañía, la Empresa Bosco (hijo), que se anuncian así: “FANTOCHES Y TRANSFORMACIONES LUMINOSAS. GAUTIER-SISTEMA MOLDES.”, lo cual suponemos que se trata de además de una compañía que oferta espectáculos de fantoches, oferta proyecciones con algún tipo de aparato que utiliza la luz para realizar juegos de luz y sombra.(El Municipio, Rosario, 11 de febrero de 1905, p. 2.). Otra curiosidad son los espectáculos de lucha romana, los cuales se anuncian diariamente en el periódico cuando los hay en Rosario. En estos se enfrentan luchadores y siempre el último combate queda postergado para el día siguiente, hecho que el anuncio en el periódico anuncia efusivamente.

Hay que esperar el mes de abril para encontrar una referencia a un proyector de vistas, aunque en unas condiciones muy especiales. Se van a organizar conferencias "salvacionistas" del Ejército de Salvación:

Llegará a esta ciudad mañana viernes, uno de los jefes de significación de la administración salvacionista el cual ha venido de Londres en representación del cuartel general del ejército de salvación para inspeccionar las dependencias de la institución, establecida entre nosotros. El brigadier Isaak Smitt [sic], que es el jefe de la referencia, dará algunas conferencias en el Rosario, como las que ya ha dado en la capital federal y en La Plata; el objeto de las cuales, es dar a conocer con más proligidad las proyecciones de la obra salvacionista.
La primera conferencia, ilustrada por vistas de cinematógrafo, se dará mañana a la noche en el salón del “Círculo Roma” de la calle Laprida.
El sábado por la noche dará una conferencia para la colectividad inglesa en el salón de San Bartolomé, Urquiza y Paraguay, y el domingo conferenciará en el salón social.

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El Municipio, Rosario, 6 de abril de 1905, p. 2.

El cinematógrafo, utilizado por Isaac Smith, miembro del ejército salvacionista, le permite realizar una misión de proselitismo por Argentina. Es por tanto un uso social e ideológico. En esos mismos momentos, se va a inaugurar, según Sydney Paralieu, el salón Biógrafo, el 15 de abril en Santa Fe, 1206, que presenta la película La Pasión de Cristo. Parece que deja de anunciarse el 2 de julio de 1905.

El acontecimiento más importante, en 1905, desde el punto de vista de la proyección fija es indudablemente la apertura del local Teatro Japonés, situado calle San Luis, 983. Están de moda los teatros japoneses, como el de Madrid, inaugurado en octubre de 1901. En este caso, el local está claramente destinado a las proyecciones de vistas fijas, aunque de vez en cuando, se presentan cintas, pero de una forma bastante excepcional. Se anuncia a partir del 23 de abril y dos días después un anuncio más importante explica lo que es el 

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El Municipio, Rosario, 25 de abril de 1905, p. 2.

Es por tanto un teatro dedicado a la proyección de vistas y se sigue anunciando en El Municipio durante todo el año, algunas veces explicitando su programación. Sobre la revolución del 4 de febrero en Argentina: El combate de la estación Sorrento (vista tomada de la estación), El combate de la estación Sorrento (vista tomada del lado de la defensa), La tragedia de Pirovano (Rebelión de la tropa y muerte de los jefes dirigentes). Lo cual muestra una producción de vistas sobre eventos de actualidad argentina. Y de la guerra ruso-japonesa: Campamento japonés en la Manchuria y llegada de prisioneros rusos, Campamento ruso en la Manchuria y llegada de prisioneros japoneses (El Municipio, Rosario, 2 de junio de 1905); Primeros ataques japoneses a Port Arthur, Derrota de la escuadra rusa, Carga de cosacos, Puente egipciano en St Petersburgo, Asesinato en Bakú, Asesinato del prefecto de Moscu, Bombardeo de Odessa (Potenkine) (El Municipio, Rosario, 29 de agosto de 1905.). Mostrando en este caso vistas de la actualidad de esta guerra. También se muestran vistas de actualidad de otros países, como España con Atentado al rey de España en París, o Italia con El ruidoso proceso Murri-Bonmartini  (El Municipio, 14 de junio de 1905). Pero cómo son vistas fijas y no animadas.

A principios de junio llega César Watry a Rosario, que se anuncia en El Municipio. Se trata, en este caso, de una de las figuras más importantes del espectáculo y de la prestidigitación de esos años. Se anuncia su próximo debut en el Teatro Colón, presentándolo como artista productor de “espectáculos de ilusionismo y fantasmagoría” (El Municipio, 2 de junio de 1905). Debuta el día diez de junio, siendo reseñada de nuevo la inauguración de su espectáculo:

Colón
Debutan esta noche en el teatro Colón, presentando espectáculos mágicos, fantásticos y excéntricos de ilusionismo e impresión el artista italiano Watry y su esposa Delia.
El programa se compondrá de cinco partes, con trabajos distintos, tratándose, según la prensa bonaerense, de algo científico, sorprendente y agradable.

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El Municipio, 10 de junio de 1905, p. 2.

Días más tarde, el periódico hace una reseña más larga sobre el espectáculo de Watry en la cual se anuncia la presencia de un biógrafo, una de las numerosas variantes de cinemtógrafo, como uno de los elementos del espectáculo del italiano:

Colón
Los juegos de prestidigitación de miss Delia, las desapariciones de la cámara amarilla de Mr. Watry, los ejercicios de los clowns Grassy's y las vistas cómicas de un buen biógrafo, han tenido para el público del Rosario mayor interés que los agudos dramáticos de la señora De Frate y los trinos de la señorita Reggini, pues en ninguna función de la última temporada lírica, hubo tanta concurrencia como anteanoche en le teatro Colón.
El teatro estaba lo que vulgarmente se deice "a reventar", bastando la anotación real de que en el momento de dar principio al espectáculo no quedaba en la boletería una localidad.
El lujo y elegancia con que se presentan y llenan todos los números del programa y la variedad de los juegos y ejercicios verificados con suma ligereza, satisfacen al público atraído al aristocrático coliseo por la baratura de los precios, sobre todo.
Hoy se celebrará la tercera función con algunas novedades.

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El Municipio, Rosario, 13 de junio de 1905, p. 2

Por lo que a pesar de reseñar más extensamente este espectáculo, el cronista social, buen aficionado a la zarzuela, parece haber escrito esta larga reseña más por criticar una obra de zarzuela que no es de su gusto, que por haberle gustado el espectáculo de Watry. El mismo día encontramos una extensa publicidad sobre el espectáculo, en el que se detalla diferentes números, algunos con títulos en inglés. Su espectáculo constaba de cinco partes, en algunas se afirma realizar “experimentos”, así como usar utensilios tales como la “Cámara Amarilla”, que permite a Watry la “exhibición de personajes que aparecen y desaparecen a la vista del público”. Pero lo que más nos llama la atención es la quinta parte: "El gigantesco y muy notable “Watrygraff”, con escogidas vistas y grandes novedades."

El Municipio, Rosario, 13 de junio de 1905, p. 2

Cesare Watry no es el primero en darle al aparato su proprio nombre, Watrygraff así lo hace también el gran transformista, Leopoldo Frégoli y su fregoligraff. Como en el caso de su compatriota, el cinematógrafo sólo es un ayudante, un complemento a su espectáculo. Y según lo que se desprende de la prensa, sólo presenta vistas cómicas. Da su última función, el 25 de junio de 1905.

En los meses siguientes, ya no se presenta, al parecer, ningún nuevo aparato. Por lo menos la prensa consultada no lo señala. El teatro japonés es el único que sigue presentando vistas fijas en su Cosmorama Artístico de Actualidades.

En los primeros días de 1906, con motivo de la Fiesta de la agricultura en el Baradero,  el Municipio anuncia el programa donde figura un aparato de proyecciones ::

[...] Día 3: De 8.30 a 11.30 – Retreta por las bandas de música y gran función de cinematógrafo en la plaza General Mitre. [...]
Día 5: Fiestas populares en la plaza de Colon, bandas de música, cinematógrafo y baile en la gran carpa oficial hasta las 2 a.m.

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El Municipio, Rosario, 25 de enero de 1906, p. 2.

Este programa confirma la presencia del cinematógrafo en la ciudad de Rosario y que sirve para fiestas populares en la calles. La evocación del aparato no tiene nada de exclusivo y de novedoso según aparece en el programa. Se trata de una herramienta para divertir a la gente y fácil de acceso para las clases populares. Tanto en el año 1905 como en 1906, las actividades cinematográficas no se localizan en los teatros sino de forma bastante original en los comercios, los bares y los cafés. En cierto modo, constituyen una forma de aliciente comercial. Muchos lugares ofrecen espacio donde se puede ver vistas animadas. Según lo reseñado por el historiador Sydney Paralieu, encontramos aparatos en comercios como la Confitería Florida (Córdoba, 1178/1184) o el Bar Florida (San Martín, 759/763). En la primera se ofrecen funciones con un proyector Gaumont comprado por Emilio Carchano (1887-1966), durante el año 1905 (Sydney Paralieu, op. cit., p. 17). El segundo ofrece número de variété y, en algunos meses de 1905 y 1906, se presentan vistas cinematográficas (Ibid., p. 17). Enrique Durán, dueño del Café Puerto, situado en LIbertad, esquina San Lorenzo anuncia proyecciones cinematográficas todas las noches, desde el 10 de marzo.

El Municipio, Rosario, 10 de marzo de 1906, p. 3

Sin embargo, aquí como en otros muchos casos, no conocemos las películas que se estrenan en este local. El último anuncio es del 15 de abril de 1906. Lo mismo ocurre con el Café de la Bolsa que ofrece proyecciones cinematográficas a partir del 24 de marzo de 1906: 

¡Gran éxito! Gran atracción EN EL CAFE DE LA BOLSA. San Martín entre Santa Fe y San Lorenzo. Concierto todas las noches de 5 ½ P.M. a 12 ½ M. por la ORQUESTA DAMAS VIENESAS. Vermuth-Concert los domingos y días festivos a 12 M. Cinematógrafo – Vistas nuevas todas las noches.

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El Municipio, Rosario, 24 de marzo de 1906, p. 4.

El Cinematógrafo aparece primero como un elemento secundario en medio de otros divertimientos. Sin embargo a partir del 27 de marzo cobra más importancia formando parte del titulo que dice “CINEMATOGRAFO Y ORQUESTA”. Según Paralieu, el propietario es Antonio Lluch y el proyeccionista Emilio Carchano (Ibid., p. 18).

El Municipio, Rosario, 27 de marzo de 1906, p.4

La moda de los cafés con cinematógrafo se intensifica a lo largo del año 1906, y en abril, pocos días después de que desaparece el aparato del Café Puerto, el Gran Café Rosarino, en Libertad 977, propiedad de los señores Esparraguerra y Riera, se anuncia, aunque el reclamo parece indicar que el cinematógrafo ya ha empezado a funcionar desde hace algún tiempo.

El Municipio, Rosario, 26 de abril de 1906, p. 3

Por aquellos días, también se organizan proyecciones, a partir del 5 de mayo de 1906, en el Gran Bar (Rosario y su zona: Historias y curiosidades). Otro bar, el Columbia, en la Sala París (Córdoba, 1155), propone proyecciones cinematográficas hasta el 24 de junio. El dueño del bar Columbia, propiedad del señor Ángel Passerini (Italia, 1868), un italiano instalado en Rosario. 

El Municipio, Rosario, 24 de mayo de1906, p. 3.

Tan pronto como deja un bar las proyecciones cinematográficas, otro café toma el relevo y propone a su vez vistas animadas. Así lo hace El Gran Café Salón Argentino (Calle Rioja, 960-968), desde el 14 de julio hasta el 19 de agosto de 1906

El Municipio, Rosario, 14 de julio de 1906, p. 4

Lo más relevante de este nuevo cinematógrafo es el anuncio de vistas de Rosario, lo cual indica que existen cinematógrafos, probablemente locales, que van a rodar cintas rosarinas. Aunque, se puede pensar que durante los diez primeros años se han filmado algunas vistas, es ésta la primera indicación. La multiplicación de cafés "cinematográficos" es indudablemente una de las peculiaridades de la explotación cinematográfica en Rosario. En cierto modo, el invento ya se ha ido integrando a la vida cotidiana, y no parece ser, de por sí, un aliciente suficiente para los teatros, lo cual se explica por la competencia de estas salas algo improvisadas. El interés por el cinematógrafo es manifiesto y además se llegan a hacer la competencia dos o tres simultáneamente. No se puede excluir, por otra parte, que algunos de esos aparatos van de bar en bar, lo cual podría explicar que cuando desaparece un cinematógrafo de un bar, parece que surge otro en otro café. Al parecer, las proyecciones de películas en los cafés también producen disturbios según lo que señala la prensa:

Los cafés con cinematógrafos
Desde tiempo atrás la mayoría de los cafés del Rosario, han introducido, como medio de diversión para sus clientes, la instalación de vistas cinematográficas, ofreciendo el aspecto de verdaderos espectáculos públicos, tal es la concurrencia que a ellos acude.
A estos sitios de reunión concurren noche a noche un gran número de familias con el fin de pasar unos momentos de distracción, a la vez que con el de proporcionar la diversión y alegría de los niños, que gozan y ríen a mas no poder a la vista de las escenas cómicas que los reflectores eléctricos proyectan sobre el lienzo.
Nada de particular ofrecerían estos espectáculos si en los locales donde se efectúan, se observara el orden y prudencia que debe reinar en todas partes, donde la presencia de familias impone el debido respecto que se merecen; pero por desgracia no resulta así.
En todos estos cafés y principalmente en los días domingos y feriados, es tan enorme la cantidad de gente que a ellos concurre, que es materialmente imposible, no ya conseguir un asiento ni una mesa desocupada porque desde las primeras horas de la noche son tomadas por asalto, sino entrar, ni mucho menos salir de su interior por la barrera humana que se forma hasta en las mismas puertas.
Piénsese entonces en las gravísimas consecuencias que produciría cualquier incidente que pudiera ocurrir en esos sitios y a la hora en que se ven atestados de gente, tan susceptibles por otra parte, en donde para nada se tiene en cuenta la compostura y el orden.
Sin ir más lejos, antenoche mismo, en uno de esos cafés, hubo de producirse un incidente que, a no dudarlo, hubiese resultado de dolorosas conscuencias, lo que felizmente no ocurrió debido a la acción de varias personas que intervinieron.
No obstante, uno de los mozos de servicio, resulté herido, produciendo el desorden, la incomodidad y alarma consiguiente en las muchas familias que a esa hora se encontraban reunidas.
Y entre tanto, ni la policía ni la municipalidad, han creído oportuno hasta hoy, tomar la intervención que les corresponde, dejando sentir su acción, la una, en el sentido de disponer una vigilancia especial, pues en el incidente a que nos hemos referido, para nada intervino la policía; y la otra, reglamentando esos espectáculos donde acude tanta o más gente que a los mismo teatros.
En el sentido indicado, es urgente la adopción de medidas tendentes a reprimir abusos y prevenir hechos tan frecuentes en los sitios de aglomeraciones.
La inspección municipal por su parte, debe también dejar sentir su acción en forma de visitas sanitarias, pues los servicios interiores de esos locales, dejan mucho que desear.

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El Municipio, Rosario, 15 de mayo de 1906, p. 1.

Por un lado, este artículo confirma el éxito de estos cafés que proyectan vistas con el cinematógrafo. En efecto las personas acuden a estos lugares en gran número, lo que produce incidentes. Por otro lado, también el artículo denuncia la falta de higiene de estos lugares que hay que controlar y mejorar.

En cuanto a los teatros, el cinematógrafo no aparece en ninguno de ellos. Sólo al final del año. Lo que también conviene resaltar durante este año 1906, son los anuncios repetitivos de ventas de aparatos cinematográficos. Eso empieza desde el mes de enero con un anuncio que se publica del 25 de enero al 10 de febrero:

El Municipio, Rosario, 25 de enero de 1906, p. 2.

Durante el mes de mayo, Fernando Destefano -del que no se sabe nada- también propone a la venta un aparato que, en cualquier caso, ya ha funcionado y no se puede excluir que sea una de los que exiben vistas en uno de los cafés.

El Municipio, Rosario, 11 de mayo de 1906, p. 3.

Como se puede apreciar, la luz eléctrica y las vistas (la guerra ruso-japonesa) son los argumentos de venta que se ponen de manifiesto. Otro anuncio se publica en el mes de junio, entre el 17 y el 20, lo cual parece indicar se ha vendido rápidamente.

El Municipio, Rosario, 17 de junio de 1906, p. 3.

Estos anuncios revelan la presencia de varios aparatos en la ciudad y de la posibilidad de reproducir cintas. También tienen episodios de guerra que nos recuerdan los de la guerra angloboer que tanto han gustado al público. La venta del cinematógrafo confirma la idea de facilidad de acceso y de que no se trata de primeras proyecciones.

Esta venta de aparatos cinematógrafos se completa con un curioso anuncio, publicado por dos operadores europeos, que proponen su servicio:

El Municipio. Rosario, 17 de julio de 1906, p. 3 

El anuncio no deja del todo claro lo que ofrecen estos dos operadores. ¿Funciones de cinematógrafo? ¿Rodaje de películas? La verdad, el anuncio no es lo bastante explícito como para poder sacar una conclusión.

Transcurrido el año 1906, nos damos cuenta de que el periódico El Municipio, poco evoca el cinematógrafo, excepto en los anuncios. El Cinematógrafo parece asociado con las clases populares que frecuentan los cafés, y no merece el prestigio de los teatros y otros espectáculos. Sin embargo a pesar de las críticas de inseguridad e insalubridad, el Cinematógrafo atrae a las masas. El número de locales y cafés que proporcionan vistas del cinematógrafo revelan su éxito y su integración en la ciudad de Rosario.